Una unidad falsa, radical y equivocada está uniendo a protestantes y católicos para exaltar la Sagrada Eucaristía y el ecumenismo por encima de la palabra de Dios. Hay un esfuerzo en marcha en el movimiento interreligioso para eliminar la práctica de la comunión cerrada. Según Roma, todos somos uno y todos somos parte de Cristo; y por esta razón, se debe seguir la participación en el mismo pan y vino eucarísticos. El fruto del ecumenismo es lograr que los protestantes abracen las liturgias y sacramentos católicos, acercándolos a Roma y neutralizando así la protesta de la Reforma.
Hillsdale College es una institución conservadora no confesional fundada por bautistas ubicada en Hillsdale, Michigan. El periódico Hillsdale Collegian publicó un artículo el 21 de noviembre de 2024, titulado “Orador aboga por la unidad en la Eucaristía” y argumentó que “los protestantes y los católicos pueden encontrar más puntos en común sobre la Eucaristía” de lo que la mayoría de la gente cree.1
En el documento estudiantil universitario se afirmó lo siguiente sobre la unión de ambas religiones:
• “La transubstanciación puede unir a los cristianos, no dividirlos”, dijo el autor y teólogo Brett Salkeld en una conferencia el 18 de noviembre. “La Sociedad Católica del Hillsdale College organizó la charla de Salkeld, ‘Transubstanciación y unidad cristiana’. Salkeld ha escrito varios libros, incluido ‘Transubstanciación: teología, historia y unidad cristiana’ en 2019, y se desempeña como teólogo arquidiocesano de la Arquidiócesis Católica Romana de Regina ”. “La conferencia atrajo a estudiantes católicos y protestantes por igual, dejando pocos asientos vacíos en un aula del sótano de Lane Hall”. “El trabajo del Dr. Salkeld puede ayudar a los católicos a entender mejor su propia fe, y puede ayudar a los protestantes y a otros a no desarrollar una falsa comprensión de esa enseñanza ”, dijo el profesor de teología Mickey Mattox. “Creo que logró hacer ambas cosas. El evento fue un rotundo éxito”. “Salkeld dijo que su énfasis en que la transubstanciación es un acto de Dios, no del hombre, es importante para unir a católicos y protestantes en torno a la Eucaristía”. “Cuando los católicos y los protestantes pueden ponerse de acuerdo sobre la presencia real en la Eucaristía, pueden unirse en la comunión cristiana. “Necesitamos afirmar la misma fe, pero no la misma teología”, dijo Salkeld.”
Cuando se contrata a teólogos católicos para que enseñen a estudiantes protestantes, éstos les obligarán a adoptar prácticas y creencias asociadas con el catolicismo. Un aspecto central de este fenómeno es la creciente aceptación de la Sagrada Eucaristía, una doctrina católica clave que los fundadores de la Reforma protestante rechazaron originalmente. Este cambio se presenta a menudo como un movimiento hacia la unidad y el ecumenismo, pero en realidad atrae a los protestantes hacia las concepciones católicas de la fe. Con el tiempo, esta tendencia plantea profundas preguntas sobre la singularidad de la identidad protestante y sobre si sigue habiendo o no alguna razón para seguir separados.
La Reforma protestante está lejos de terminar, a pesar de los avances significativos que ha hecho el ecumenismo para tender un puente entre las tradiciones protestante y católica. La obra iniciada por los reformadores del siglo XVI sigue siendo vital, ya que su llamado a abrazar la primacía de las Escrituras y rechazar las tradiciones creadas por el hombre sigue resonando en un mundo que a menudo busca diluir la claridad doctrinal en aras de la unidad. La proclamación del evangelio en su pureza, el rechazo de las prácticas y doctrinas contrarias a las Escrituras y la necesidad de una renovación continua en la Iglesia son tan urgentes hoy como lo fueron en los días de Lutero, Calvino y Zwinglio. Hasta la segunda venida de Jesús, la Reforma sigue siendo una obra inacabada, que llama a los creyentes a aferrarse a la verdad de la Palabra de Dios y a luchar fielmente por la fe que una vez fue entregada a los santos (Judas 1:3).
Los protestantes que participan en el movimiento ecuménico están ayudando a sanar la herida mortal que conducirá a la siguiente crisis:
“La Palabra de Dios ha dado una advertencia acerca del peligro inminente; si no se hace caso, el mundo protestante aprenderá cuáles son realmente los propósitos de Roma, sólo cuando sea demasiado tarde para escapar de la trampa. Ella está creciendo silenciosamente en poder. Sus doctrinas están ejerciendo su influencia en los salones legislativos, en las iglesias y en los corazones de los hombres. Está acumulando sus estructuras elevadas y macizas, en cuyos secretos recovecos se repetirán sus persecuciones anteriores. Sigilosa e insospechadamente, está fortaleciendo sus fuerzas para promover sus propios fines cuando llegue el momento de atacar” (El conflicto de los siglos, 581).
“La Iglesia romana tiene planes y modos de operar de largo alcance. Está empleando todos los medios posibles para extender su influencia y aumentar su poder en preparación para un conflicto feroz y decidido para recuperar el control del mundo, restablecer la persecución y deshacer todo lo que el protestantismo ha hecho” (El conflicto de los siglos, 565).